Concierto: Coldplay (Madrid) 20.05.2012

SETLIST: Back to the Future Theme (intro)/ Mylo Xyloto/ Hurts Like Heaven/ In My Place/ Major Minus/ Lovers In Japan/ The Scientist/ Yellow/ Violet Hill/ God Put A Smile Upon Your Face/ Princess of China/ Up in Flames/ Warning Sign/ A Hopeful Transmission (instrumental)// Don't Let It Break Your Heart/ Viva La Vida/ Charlie Brown/ Paradise/ Us Against the World/ Speed Of Sound/ Clocks/ Fix You/ M.M.I.X. (instrumental)/ Every Teardrop is a Waterfall/

Y los Coldplay más polémicos de los últimos diez años llegaron a Madrid, su única parada española (y digo polémicos por los ataques que "Mylo Xyloto" ha recibido, si antes tenían enemigos, ahora los han duplicado, es lo que tiene crecer y hacerse más y más grandes y llegar a más audiencia). No deja de sorprender que sea la segunda vez en menos de un año que pasan por la capital española haciendo caso omiso de otras ciudades y es que, al parecer, a Chris Martin no le hizo mucha gracia la cantidad de críticas que su último y controvertido concierto en Barcelona provocó. ¿Por qué? Chris y los suyos pretendían grabar el DVD oficial de la gira de "Viva La Vida" (2008) en el Estadio Olímpico Lluís Companys de Barcelona y todo apuntaba a que sería una velada inolvidable de no haber sido por los constantes problemas técnicos de sonido y los abucheos por parte de público. Capearon el temporal como pudieron (jodidamente bien, todo hay que decirlo) y a Chris se le quedó en la memoria, es por eso que, para presentar "Mylo Xyloto" (que a nosotros nos sigue pareciendo un álbum sensacional) no eligió Madrid por casualidad y, pese a la lluvia, protagonizaron uno de los conciertos más espectaculares que ha tenido lugar en la plaza de toros de Las Ventas. ¿Era, pues, necesario otro concierto en menos de un año en la misma ciudad?

Chris eufórico
(Foto de la Agencia EFE)
Sí, "Mylo Xyloto" es un gran álbum que crece poco a poco, con traspiés (para qué negarlo) y mucho menos inspirado que "Viva La Vida"o los inigualables "Parachutes" (2000) o "A Rush Of Blood To The Head" del 2002 (con el que también hicieron dos paradas en nuestra ciudad cuando todavía no eran el grupo masivo que son ahora) pero sigue siendo un álbum de "pop de estadio" (en el sentido más amplio del término), con todo lo bueno y lo malo que eso conlleva. Actualmente ver a Coldplay en directo es llegar a entender el por qué de su éxito, es presenciar la imparable ascensión de un grupo que quiere ser tan grande como U2 (y lo está logrando) y todavía puede que no haya llegado a su punto de inflexión. Coldplay, a diez años de su primer disco, son tan excitantes y refrescantes, polémicos y gigantescos como deberían de serlo Bono y The Edge si tuvieran aún ganas (siento las constantes e irritantes comparaciones con la banda irlandesa pero la carrera de Coldplay y la de los de Dublín guarda muchos puntos en común y escribir sobre uno es mencionar al otro en todo momento).  Todo el contrasentido, lo absurdo, la genialidad y la paradoja de cuatro chavales que se encuentran llenando estadios allá por donde pasan se han visto en su concierto madrileño.

Coldplay en Madrid
(Foto de la Agencia Efe)
Una noche lluviosa y fría, propia de una primavera que no termina de abandonarnos para mi octavo concierto del grupo (sí, has leído bien, sé de lo que escribo) y no podía haber sido mejor. Un buen montaje (la puesta de largo de "Mylo Xyloto") y un estadio como el Vicente Calderón lleno hasta la bandera (repleto de gente hasta en los accesos y todo un caos para poder entrar). ¿Dónde estaba toda esta gente cuando hace casi diez años Coldplay nos dejaban plantados cancelando en la misma noche del concierto a poco más de mil espectadores durante la gira de su primer disco ("Parachutes") para hacer un bolo en Londres? ¿Y cuándo tocaron en la gira del "A Rush Of Blood To The Head" y nos electrizaron a los pocos allí presentes con aquel "Politik" que sonó a gloria? El precio de llenar un estadio es grande porque entre sesenta mil personas hay mucho advenedizo que asiste al concierto como si de un evento de moda ineludible se tratase y hay pocos que disfruten con su música.

Una entrada espectacular con el tema principal de "Regreso Al Futuro" de Alan Silvestri y todos los treinteañeros suspirando al recordar a Marty McFly, "Mylo Xyloto" y a calentar con "Hurts Like Heaven" mientras descargan decenas de fuegos artificiales. Con "In My Place" se meten a la gente en el bolsillo y logran el primero coro al unísono de todo el estadio. "Major Minus" (intensa) y de nuevo un directo a la mandíbula con el éxito "Lovers In Japan" y toneladas de confeti. Chris, Jonny, Will y Guy lo tienen claro y no van a escatimar en ningún recurso. Si para ser grandes tenemos que hacer lo que ellos hacen, hagámoslo multiplicado por mil; más pantallas, más pasarelas, más iluminación, más guitarras, más confeti y pirotecnia que los propios Kiss, usemos tanto artificio que Rammstein parezcan unos aficionados. ¿Quieren rock? Lo tendrán con la versión de "God Put A Smile Upon Your Face" transformada en su particular "Where The Streets Have No Name" y, si quieren saber lo realmente grandes que podemos llegar a ser, hagamos titubear el ritmo del concierto con una innecesaria "Princess Of China" con la voz enlatada de Rihanna para luego resucitar y levantar a sesenta mil almas con tres canciones directas al estómago como "Viva La Vida", la genial "Charlie Brown" y la infantil pero resultona "Paradise" no sin antes emocionar a los más sensibles con la joya que es "Up In Flames" porque tenemos repertorio para tocar el corazón de todos y cada uno de los asistentes.

Y, para terminar, como si no hubiese ocurrido nada, se sacan el último As de la manga con "Clocks" (y mil efectos láser), "Fix You" (más fuegos artificiales) y la soberana horterada que es "Every Teardrop is a Waterfall" pero ante la que uno no tiene otra cosa que quitarse el sombrero y descubrirse porque en directo es una auténtica explosión de alegría. A día de hoy no hay una experiencia más vital y positiva que ver a Coldplay en directo, son una inyección de optimismo y con ellos parece que el verano ha comenzado porque hasta la lluvia nos respetó.

© 2012 Conde Draco