Crítica: Trent Reznor & Atticus Ross "The Girl with the Dragon Tattoo"

No hace falta ser muy listo para darse cuenta de que a Trent Reznor, cuando se decidía a acabar con Nine Inch Nails, lo que más le pesaba era su propio nombre (como Michael Stipe ha llegado a admitir con R.E.M.) y no tenía ni la menor idea o gana de abandonar el mundo de la música. Si ya con "The Social Network Soundtrack" nos demostraba por dónde andaba perdido "el duende del espiral descendente" en esta "The Girl With The Dragon Tattoo" vuelve a adentrarse en el peligroso y a veces tedioso (para qué engañarnos) mundo de las bandas sonoras junto a su ya inseparable compañero de fatigas, Atticus Ross, para salir, como siempre, bien parado y llevarse de nuevo  grandes críticas e importantes premios para corroborar que, lejos de la corrosión y salvajismo industrial de su proyecto llamado Nine Inch Nails, hay un músico serio, de gran talento, lleno de creatividad y todavía grandes ideas que es capaz de asaltar los medios y adentrarse en audiencias que nunca asistirían a uno de su conciertos más extremos.

Aquí, Reznor vuelve a saltar al vacío en un género en el cual ya se sentía a gusto en el grupo que revolucionó la escena musical de los noventa y cuyas actuales coordenadas no distan demasiado del camino más reposado de sus últimos discos con ellos, por no mencionar su delicado álbum (y también suicidio artístico) "Ghosts I - IV" (2008) o su menos inspirado pero igual de revelador "How to Destroy Angels" (2010). 

El silencio se rompe con una versión del "Immigrant Song" de Led Zeppelin con Karen O (Yeah Yeah Yeahs) aullando poseída bajo el influjo del espíritu de Robert Plant. Sin llegar a aportar nada nuevo a la original, el envoltorio y la producción son tan sorprendentes que dotan a la canción (inmortal ya de por sí) el tono rompedor que la película necesita, es todo un espectáculo contemplar el trailer en el cine con el tema de Zeppelin atronando en la sala.

Inquietantes, y muy en la línea de NIИ, son "She Reminds Me Of You" o "People Lie All The Time" porque "Pinned And Mounted" se adentra en caminos más convencionales ya que no será hasta "A Thousand Details" cuando nos levantaremos del sofá en un tema que podría haber sonado en "The Fragile", "Perihelion", "With The Flies" o "Hidden In Snow" son interesantes ejercicios de texturas ideales como fondo a las imágenes de la película y eso es algo que nos daremos cuenta según vayamos avanzando en un disco de treinta y nueve canciones (en el que conviene ser más acertado y llamarlos cortes tanto por su carácter como por su duración, aunque también encontremos grandes desarrollos com "One Particular Moment", "With The Flies" u "Oraculum" que sobrepasan generosamente los siete minutos).

"An Itch" se acelera hasta llegar a la siniestra melodía a piano de "Hypomania" (Reznor gana enteros cuando se dedica al piano como en "Parallel Timeline With Alternate Outcome") o la interesantísima "Aphelion", preciosa resulta "The Same As The Others" y nueva en cuanto a su carácter "You're Here" (como ocurre con "Milleannia") pero el festín de ruidos y curiosos e inhabitados territorios electrónicos llega a su fin tras "A Pair Of Doves", "Great Bird Of Prey" u "Of Secrets" y con la intensa "Is Your Love Strong Enough?" da el cierre definitivo a un disco que sólo gustará a los fanáticos de Reznor y a los amantes de las buenas y trabajadísimas bandas sonoras, más que suficiente. Uno de esos álbumes en los que uno tiene la sensación que siempre lo escuchará poco para poder hablar de él con propiedad. Más que notable.

© 2011 Jim The Fuckin' Real Tonic