Crónica: Ghost (Madrid) 14.04.2017

SETLIST: Square Hammer/ From the Pinnacle to the Pit/ Secular Haze/ Con Clavi Con Dio/ Per Aspera ad Inferi/ Body and Blood/ Devil Church/ Cirice/ Year Zero/ Spöksonat/ He Is/ Absolution/ Mummy Dust/ Ghuleh-Zombie Queen/ Ritual/ Monstrance Clock/

La verdad es que si la puesta de largo de “Meliora” (2015) ha terminado siendo tan espectacular ha sido debido a las nuevas canciones que integran el nuevo Ep, “Popestar” (2017) y que no han hecho más que confirmar que, tras la inicial llamada de atención de su imagen, si Ghost pueden presumir de algo es de un repertorio compuesto de grandísimas canciones, una habilidad innata para mezclar pop y hard rock de influencias setenteras sin despeinarse, composiciones con vocación de himnos que, sin embargo, han visto empañado su lustre por el resurgimiento de Magna Carta Cartel y las acusaciones de Simon Söderberg a un supuestamente desemascarado Tobias Forge como Papa Emeritus. La pregunta que se me viene a la cabeza es, ¿ya estamos todos contentos, ya disfrutamos más de la música de Ghost, hay alguien en la sala que todavía tenga la poca vergüenza de asegurar que disfrutaba de MCC y Tobias Forge mucho antes de “Opus Eponymous” (2010) o siquiera haber escuchado su nombre? Personalmente, cada vez me importa menos el nombre de los músicos que escucho y me ciño a su obra y si algo han demostrado Ghost o Tobias es un talento desmesurado para la melodía, para componer grandes estribillos repletos de magia, el resto es anecdótico pero imposible negar que el producto lo forma el todo; las canciones y la imagen y, por desgracia, si nunca hubiese aparecido en escena un personaje tan siniestro pero tan socarrón como Emeritus, puede que nadie hubiese prestado atención a una canción como “Cirice” de ser firmada por Magna Carta Cartel, como ocurre con las que integran el bello “Goodmorning Restrained” (2009)

Así pues, Ghost visitaban de nuevo España con un Palacio de Deportes con el aforo reducido pero mostrando una generosa entrada y un varopinto público en el que no faltaban heavys de vieja alcurnia, pandillas de chavales, moteros, blackmetaleros y familias; porque Emeritus y sus Ghouls sin nombre no sólo quieren recuperar el encanto del shock rock sino que aspiran a la conquista del mundo a través de toneladas de merchandising con camisetas, plugs anales y vibradores, máscaras y, por supuesto, atraer a los niños a sus conciertos; una imagen curiosa fue la de un pequeño y simpático Emeritus a hombros de su padre (¡bien por él!) o un matrimonio regalándole a su niña una enorme camiseta en la que el Papa lucía como Marilyn Monroe. ¿Qué hay de malo en ello? Para todos aquellos que hayan nacido hace poco y no conozcan lo ocurrido en la cultura norteamericana de los setenta, tan sólo recordarles que Kiss lograron seducir a millones de niños que ahora son parte de su fiel Kiss Army con bonitas y metálicas fiambreras con su efigie, quizá a nosotros nos suene remoto pero Emeritus sabe bien lo que se trae entre manos y tan sólo hacía falta echar un vistazo a la abarrotada pista para ser testigo del exagerado crecimiento de una banda no apta para aquellos que se toman la vida demasiado en serio, lo suficiente como para perderse esas canciones en directo porque Tobias Forge no sea realmente un demoníaco Papa venido de otra dimensión. Pobres diablos...

La polémica de esta última visita era también comprobar de primera mano como funcionaban los nuevos Nameless Ghouls y reírse en la cara de aquellos que aseguran que Ghost han perdido lustre con la ausencia de los antiguos músicos, esos siempre cambiantes a los que Emeritus no sólo se ha negado siempre a darles nombre propio sino tan sólo el de elementos alquímicos y que incluso cuando firman sus propios discos lo hacen con un sello o dibujándolo ante la atenta mirada de un Papa que no dudará en bromear con todo el mundo sin perder ojo a todo lo que ocurre a su alrededor.

Zombi (Steve Moore y Anthony Paterra) venían presentando de manera tardía “Shape Shift” (2015) y esa mezcla de space rock progresivo que tan bien funciona para un rato de THC en tu dormitorio pero que se resiente en una actuación de cuarenta y cinco minutos. Los roadies preparan el ritual y descubren la batería mientras suena Jocelyn Pook y recuerdo la primera vez que escuché “Opus Eponymous” en un viaje a Londres, Ghost eran la gran sorpresa pero todavía una banda minoritaria, ahora me encuentro a pocos segundos de mi sexta actuación y me resulta imposible negarme a canciones como “Square Hammer”, un clásico inmediato, o el entrecortado riff de “From the Pinnacle to the Pit”, ninguna tiene más de dos años pero resuenan en mi cabeza como si fuesen clásicos y por la respuesta de la gente, entiendo que les está ocurriendo lo mismo.

De poco importa que “Secular Haze” sea un calco de “Shapes Of Black” de King Diamond porque aquel “Give Me Your Soul...Please” (2007) no era ni será nunca de lo mejor del danés y, nos guste o no, su impacto siempre será inferior al que tuvo “Infestissumam” (2013) en su homenaje. La imagen de Emeritus III envuelto entre humo y luces rojas es tan atractiva como plástica, han sabido crear una estética tan brutal como el poderoso riff de bajo que abre “Con Clavi Con Dio” y hasta su puente causa simpatía con miles de manos, entre ellas las de muchos niños, cantando aquello de; “Sathanas, we are one. Out of three; Trinity!”“Per Aspera ad Inferi” y llega uno de los momentos más pop con “Body and Blood” y las bromas de Emeritus III a las primeras filas como tras la intro de “Devil Church” llega “Cirice”; otro punto álgido de una noche que se hizo breve. “I can feel the thunder that’s breaking in your heart. I can see through the scars inside you” canta Emeritus sobre un piano verdaderamente mágico y ese riff que hace morir de envidia al mismísimo Kerry King. “Year Zero” levanta a todo el pabellón como “He Is” arrancará un inusitado clamor, una de las grandes composiciones de “Meliora”, sin duda.

¿Estáis preparados para algo de metal? –pregunta nuestro Papa y se asegura de nuestra respuesta antes de atacar “Mummy Dust” en un ritual en el que disfruté hasta de “Ghuleh” y ese estrambótico pero delicioso experimento surf de Los Monster que es “Zombie Queen”. Parece mentira pero “Ritual”, la canción, ocupa la importante posición antes de los bises, no olvidemos de que hubo un tiempo en el que era su single más claro (irónico, dada la cantidad de temas que poseen con semejante naturaleza) pero, claro, es que acabar un concierto con las luces encendidas cantando; “Come together, together as a one. Come together for Lucifer’s son…” no puede tildarse de otra forma que de todo un éxito. Caras felices y en un lateral se sitúa una larga cola de chavalas que, sin duda, requieren audiencia privada con Papa Emeritus III, pero vuelve a sorprenderme porque también hay padres y madres con niños y más Papas de apenas diez años; Ghost siguen su imparable ascenso y me siento orgulloso de haberlo visto desde el principio, desde luego que sí...


© 2017 Jim Tonic