Crítica: In Flames "Sounds Of A Playground Fading"

Criticar el nuevo disco de In Flames desde el sofá de casa es fácil, tanto como tiene de infantil basar el cambio de rumbo en la salida de Jesper o el nuevo look de Anders. Cierto es que han quedado lejos los tiempos de "Whoracle" o "The Jester Race" pero hay que evolucionar y cambiar, abrazar los nuevos tiempos. No podemos pedirle a ningún artista que nunca nos defraude, que nunca cambie y que siga haciendo lo mismo para siempre con el único objetivo de satisfacernos. Desde este punto de vista; In Flames han sido valientes, no se han apoltronado en sus grandes clásicos, copiando su estilo una y otra vez. Tampoco entiendo que se tache de "vendido" a un grupo que ha facturado discos de la talla de "Come Clarity", "Reroute To Remain", "Soundtrack To Your Escape" o "Clayman", todos diferentes y todos de un nivel altísimo. Creo que incluso le puedo ver la gracia a algunos temas del vituperado "A Sense Of Purpose", a la postre uno de sus discos con más éxito de ventas. 

"Deliver Us", que ya pudimos escuchar hace tiempo gracias a su original videoclip, es un buen single, pegadizo y potente pero suficientemente radiable como para sonar fuera del entorno metálico y con la impronta del sonido In Flames, con un solo realmente destacable y es que, en este disco, si hay algo que esté trabajado son las guitarras y los arreglos. No faltan buenos y correctos temas como "All For Me" o la machacona "The Puzzle". 

"Jester's Door" es un estupendo interludio para una de las obras maestras del disco, "A New Dawn". "Fear Is The Weakness" es notable y mi favorita del disco; "Where The Dead Ships Dwell" sonará contundente en directo con esos arreglos que nos recordarán a la música industrial. La sorprendente "The Attic", lenta y con una guitarra que dibuja una melodía magnífica, rozando suavemente las escalas más blueseras. Como el magnífico trabajo que han hecho con el riff de "Ropes" y el solo de ésta.

Es inútil echar de menos a los antiguos In Flames, no merece la pena. Hay que saber disfrutar de "Lunar Strain", "Whoracle" o este  "Sounds Of A Playground Fading" que, aunque no sea su trabajo más inspirado, conforman un conjunto magnífico. No será "The Jester Race" pero es un gran álbum, esperamos que  para el próximo suban un poquito más el listón, encuentren la paz en los cambios y esto se refleje en su música. Estamos deseando verles en directo en el Sonisphere de Suiza y en otoño en Madrid. 

© 2011 Jesús Cano