Concierto: Iron Maiden (Madrid) 31.05.2013

SETLIST: Moonchild/ Can I Play with Madness/ The Prisoner/ 2 Minutes to Midnight/ Afraid to Shoot Strangers/ The Trooper/ The Number of the Beast/ Phantom of the Opera/ Run to the Hills/ Wasted Years/ Seventh Son of a Seventh Son/ The Clairvoyant/ Fear of the Dark/ Iron Maiden/ Aces High/ The Evil That Men Do/ Running Free/

Un día antes del concierto de Iron Maiden del Sonisphere estábamos analizando el equipo de Blogofenia que ni siquiera habían pasado dos años desde la última visita de Iron Maiden a los escenarios españoles y ya estaban aquí de vuelta. Pensado fríamente, era todo un lujo y nos considerábamos por ello unos tipos afortunados y dichosos. Nosotros somos de los que defendemos que dentro de unos años (cinco, diez, veinte...dependiendo el caso) todos estos "grandes grupos" dejarán de hacer enormes giras y editar discos, al fin y al cabo es ley de vida, nada es eterno y por supuesto nuestro "dioses terrenales" tampoco lo son; y entonces sí que estaremos jodidos, ya que es muy difícil encontrar sustitutos medianamente fiables para sustituir a unos ACDC, a unos Maiden o a unos Metallica... No hace falta que os digamos las ganas que teníamos de ver a Maiden de nuevo en acción (siempre que pueda iré a verlos, de eso no tengo ninguna duda) y máxime conociendo que en esta gira iban a representar su clásica "Maiden England" de 1988; tour que les llevó a lo largo y ancho del planeta presentando su séptimo álbum "Seventh Son Of A Seventh Son". Estábamos muy motivados, muy metidos con Iron Maiden, apenas hacía veintidós meses que les habíamos visto y estábamos deseando repetir; y allí estuvimos, y allí les vimos y saltamos y disfrutamos escuchando "Fear Of The Dark" o "The Prisioner", y reímos viendo a Eddie pegándose con Janick Gers; e incluso nos emocionamos una vez más viendo a Dickinson blandir la cada vez más angosta bandera británica en "The Trooper"... pero como todos sabemos tras la tempestad llega la calma y de todos es conocido que las decisiones importantes deben tomarse en frío y una vez más en frío. Pues bien, pasados unos días del concierto tenemos que concluir (ante todo honestidad) que aquella noche no fue tan idílica ni tan maravillosa como nosotros (y seguro que como muchos de vosotros) esperábamos a priori...

Cuando suena el "Doctor Doctor" de UFO sabes que Iron Maiden está a punto de entrar en escena; el ambiente se caldea y la gente se pone eufórica por el mero hecho de escuchar el traqueteo de la Flying de Schenker retumbar por todo el arena. Una vez finalizada magnánima obra y a pleno sol (madre mía, cuando aprenderemos que los cabezas de cartel se ven mejor de noche...) se lanza por las pantallas laterales del escenario un "bonito" vídeo que lleva enlatado la intro de "Moonchild". Vale, ya sabemos que todos los grupos lo hacen pero pienso que se debería dar una vuelta al tema éste de las primeras partes de canciones enlatadas. Coño, qué estamos en un concierto; y sí, que el disco está muy bien, pero todos lo tenemos en casa y sabemos de memoria como suena, y si me gasto la pasta en un concierto no es para que me pongan un cd... El escenario por su parte es simple pero bonito, en un azul celeste/morado que quiere rememorar el frío y el ambiente desangelado de la portada del "Seventh Son Of A Seventh Son". El grupo sale pisando a fondo con un Harris en primera línea de fuego y un Bruce que no deja de correr por la parte de arriba del escenario. Primera estrofa de "Moonchild" y la voz de Bruce no se escucha... bueno, no pasa nada, gajes del oficio, se le sube el volumen y listo. Así, a bote pronto, nos damos cuenta que el sonido no es todo lo bueno que nos gustaría, incluso si utilizásemos el calificativo de "malo" no estaríamos exagerando en exceso. El sonido fue en todo momento sucio y mugriento, muy lejos del nivel que se puede esperar para una banda del nivel de Iron Maiden. También tenemos que decir que en este campo la culpa no esto toda suya, teniendo que cargar parte de la misma sobre el lugar donde se celebraba el evento además del excesivo viento que sufrimos durante todo el festival.

Sin mediar palabra Dickinson lanza el grito de "Can I Play With Madness" y la canción cae sin tapujos sobre todos nosotros. A nivel personal tengo que decir que la canción nunca me ha gustado y nunca me gustará; pienso que es el peor single de los siete primeros discos y una canción excesivamente moña y cansina para lo que es y representan estos monstruos. Sé que en la actualidad, y siendo como son Iron Maiden uno de los grupos más grandes del planeta, mis palabras pueden parecer poco menos que una ofensa o un sacrilegio, pero si viajamos en el tiempo y volvemos a 1987 veríamos entonces que esta canción (repito, hoy en día un clásico) fue duramente criticada y castigada; y pienso que razón no les faltaba para hacerlo. "Seventh Son Of A Seventh Son" es un gran disco, eso nadie lo pone en duda, pero por mucho que se trate del segundo álbum más vendido de la banda después de "The Number Of The Beast" hay que reconocer que no se parece en nada a la obra maestra del heavy metal. Al fin y al cabo supongo que es un tema de gustos simplemente (a algunos les gustará más y a otros menos), pero a nivel personal no puede decir otra cosa que "Can I Play With Madness" me cayó como un jarro de agua fría justo al principio del concierto. "The Prisioner" sin embargo me anima, una canción de esta envergadura y de este tesón pone las cosas en su sitio; fue un lujo escuchar nuevamente los magníficos solos de Smith y de Murray zumbando por todo el Auditorio Miguel Ríos...y por cierto, Janick Gers ¿hace algo? Vamos a ver, mucho bailecito, mucha pirueta, mucho levantar la pierna, mucho jugueteo con la guitarra (que si ahora me ahorco con el cable, que si ahora tiro la guitarra hacia el cielo y la pillo al vuelo, que si Dickinson me tapa la cara con la bandera mientras suena el solo de "The Trooper"...); mucha pijada, pero lo que se dice tocar, nada de nada. Haciendo memoria creo que apenas se le vio hacer algo mínimamente digno a excepción de la intro de "Fear Of The Dark" y algún que otro aislado y fugaz solo de "temas menores". De verdad, pienso que es una lástima lo que se le está haciendo a este hombre, totalmente relegado a un segundo o tercer plano. Su presencia ha ido desapareciendo poco a poco tras la vuelta de Smith a la banda allá por el año 2001 hasta convertirse lo que hoy en día es (un cero a la izquierda). Es una lástima, ya que siempre lo he considerado (y sigo considerándolo) un gran guitarrista, pero ahora mismo en Iron Maiden no pinta absolutamente nada.

Otro momento que cada vez me gusta menos de los conciertos de Iron Maiden es cuando les da por sacar a pasear su sonido y su vena "medieval". Qué necesidad hay de incluir en un concierto de Iron Maiden el tema como "Afraid To Shoot Strangers", y máxime cuando estás dejando fuera del setlist canciones como "Infinite Dreams" o la siempre esperadísima "Hallowed Be Thy Name". Inexplicable que toquen un tema que está a medio camino entre una "muñeira" y una melodías circense . Con "2 Minutes To Midnight" llega (al menos para mí) uno de los momentos más dramáticos de la noche;  Bruce Dickinson (ahí es nada) deja de cantar una estrofa entera por el simple hecho de que su pie de micro se enreda con un cable del escenario. La verdad que tratando de quien se trata la situación no deja de ser ridícula y penosa. Pienso que a un principiante que está tocando con su grupillo del "insti" en las fiestas del colegio puede sucederle (y así en todo con ciertas reservas), pero para alguien que lleva más de 30 años tocando en uno de los grupos más grandes del mundo?...Inadmisible. Coño, saca el micro del puñetero pie y canta la estrofa como Dios manda, que ya tendrás tiempo de desenredar el puto nudo...

Tras esta "anécdota" podemos aseverar que el concierto mejoró bastante, "The Trooper" y "The Number of The Beast" suena como lo que son, dos obras maestras de nuestra niñez y adolescencia. "Phantom Of The Opera" está bien, pero yo hubiera elegido algo de su segundo álbum y no abusar tanto del primero (un "Warthchild" hubiera quedado de lujo, no me lo podéis negar...). "Run to the Hills" y "Wasted Years" gozan de un sonido bastante aceptable y  "The Clairvoyant" suena de lujo con el característico bajo de Harris (por cierto, mucho más apagado y triste que de costumbre; apenas nos ametralló un par de veces con su "fusil" cuatro cuerdas...) atronando a todo el auditorio. El momento de más bajón de la noche lo protagoniza la canción que da título al séptimo disco de la banda británica. Joder, que eterna se hace la parte intermedia de la misma, escuchando un órgano de iglesia situado la parte superior del escenario, que dejaba una estampa poco menos que tétrica que un concierto de Maiden. "Fear Of The Dark" (la mejor del concierto) e "Iron Maiden" suenan brutales, perfectas; un verdadero  lujo comparadas con el resto. El bis lo formaban esta vez otros tres grandes clásicos..."Aces High" siempre es un placer escucharla, pero pienso que tendría que haberse escuchado en los primeros minutos del concierto y no al final del mismo, ya que para entonces vimos a un Bruce demasiado asfixiado en la interpretación de sus estrofas más aceleradas. "The Evil That Men Do", acostumbrados normalmente a escucharla dentro de las primeras canciones del show te pilla un tanto despistado, pero aún así es un lujo escuchar uno de los grandes himnos del "Maiden England". El cierre una vez más lo vuelve a poner la tercera canción de su primer disco (últimamente están utilizando esta fórmula; seguía echando de menos "Hallowed Be Thy Name"). Running Free” sonó especialmente bien y tengo que reconocer que fue una de las más me agradó del setlist de los británicos. Un tema más que aceptable que relativamente te endulzaba los momentos amargos que se vivieron en el concierto.

En resumen podríamos decir que Iron Maiden dieron un concierto aceptable (es lo menos que se les puede pedir) pero no podemos ponernos una venda en los ojos para no ver lo que realmente no queremos o no nos interesa. Seamos honestos, algo extraño había sucedido, algo raro pasó aquella noche en Rivas con Bruce, Harris y compañía; por primera vez se nos encendió el piloto rojo en Iron Maiden...

© 2013 Lord Of Metal
(Todas las fotos pertenecen a dr_zoidberg)