Concierto: Motörhead (Hellfest) 19.06.2015

SETLIST: Shoot You in the Back/ Damage Case/ Stay Clean/ Metropolis/ Over the Top/ The Chase Is Better Than the Catch/ Rock It/ Lost Woman Blues/ Doctor Rock/ Orgasmatron/ Going to Brazil/ Ace of Spades/ Overkill/

Si Lemmy no fuese Lemmy, si no llevásemos escuchando sus canciones más de veinte años, si no nos hubiese hecho pasar tantísimos buenos momentos y fuésemos unos desagradecidos podríamos afirmar que la actuación de Motörhead fue una de las más flojas de todo el festival para lo que se esperaba de ellos, para el nivel al que siempre nos han tenido acostumbrados. Y es que,  Lemmy ha decidido poner la directa y asumir el romántico destino del juglar, del bluesman del camino polvoriento, del rockero impenitente que morirá con las botas puestas sobre un escenario y ese fatalismo puramente filosófico sería lo más lógico para alguien como él sino fuese porque la vida, tras tanto exceso, le ha propinado un buen zarpazo. Lemmy sigue siendo poderoso, su presencia es auténtica, un sólo verso cantado con su cazallera voz macerada a base de whisky y cigarrillos durante años es más que suficiente para destilar cuatro décadas de rock 'n' roll pero a los que le queremos, a los que le sentimos como algo más, nos produce una pena enorme sentirle desubicado en muchas ocasiones, perdido o falto de fuerza; verle con la boca abierta balbuceando o con las manos temblorosas es demasiado doloroso como para entender que necesita descansar, necesita reponerse y lo que estamos presenciando no es la enésima gira de Motörhead sino la despedida personal de Lemmy que seguramente habrá desatendido los consejos de los médicos lanzándose a la carretera para ganarle unos minutos a la vida y escribir su epitafio tocando el bajo y cantando una vez más "The Chase Is Better Than the Catch". A todos esos chavales que acuden a ver a Motörhead y es su primera vez me gustaría decirles que lo que están viendo  no es digno de su leyenda. Sin ir mucho más lejos, hace cinco años ver Lemmy en directo era completamente diferente. ¿Habéis visto el tren de la portada de "Orgasmatron"? ¿Sabéis a lo que me refiero, verdad? Cuando el bajo de Lemmy sonaba y la guitarra de Phil y la batería de Mikkey le secundaban parecía que se encendiera un motor a reacción parido en el mismísimo infierno o esa infernal y traqueteante locomotora que inmortalizó Petagno cuando aquel disco del 86 iba a llamarse "Ridin' With The Driver". Estoy seguro de que cualquiera que haya visto a Motörhead en directo hace años entenderá lo que quiero decir y si no es que no tienes ni puta idea de quiénes son y poco importa lo que intente explicarte desde la pasión.

La misma rueda de prensa sin su presencia y sólo con el bueno de Mikkey Dee ya nos hizo temernos lo peor. No pasa nada, no es la primera vez que ocurre y Dee es un auténtico profesional en todos los sentidos; no sólo es uno de los baterías más contundentes y salvajes del rock sino que es un encanto que responde con infinita paciencia y amabilidad a todo aquel que le preguntó por su próximo disco, la gira o la salud de Lemmy para luego atender a todos los periodistas de medio mundo cuando se le acercaban para un autógrafo o una foto. Siempre que acudimos a una rueda de prensa o tenemos una entrevista; siempre escuchamos los mismos tópicos sobre la prensa especializada y la supuesta falta de profesionalidad de los blogs y webzines, irónicamente todos los medios se acercaron a los músicos de la zona de prensa buscando un selfie o un autógrafo. No hay nadie tan idiota o con tan poca sangre en las venas como para no estrecharle la mano en persona a Rob Halford, Phil Anselmo o Mikkey Dee.

¿Cómo estáis, Francia? -nos pregunta nada más salir al escenario pero aquella declaración de principios que servía de introducción; "We are Motörhead..." suena desgastada cuando hace una pausa para soltar un cansado… "...and we play Rock 'N' Roll" y atacan "Shoot You in the Back" del célebre "Ace Of Spades" (1980). Dee golpea los parches como si no hubiese mañana y Phil está en una forma estupenda, se nota que ambos disfrutan tocando al cien por cien. La sigue "Damage Case" en la que Lemmy cambia ligeramente la letra y nos damos cuenta de dos cosas importantes en su actuación; la voz está alta pero no se escucha como debería siendo tapada por los instrumentos y apenas vocaliza. Entre canción y canción, las típicas bromas simpáticas entre Phil y él con el público nos muestran a Lemmy desconectado y, honestamente, no nos gusta verle así. "Stay Clean" les hace poner la directa, suena sólida y contundente con un final apoteósico a cargo del incansable Dee.

La genial "Metropolis" quizá no sea la más acertada para un festival pero es de las que mejor suenan gracias a su tempo, Phil está soberbio y hará las delicias de todos los que nos encanta su forma de tocar con un solo tras la acelerada "Over The Top". Y volvemos a "Ace Of Spades" con  la genial "The Chase Is Better Than the Catch" en la que, aunque Lemmy sigue acusando la misma falta de potencia, suena más caliente y metido en el concierto que antes. Otra cosa que me ha llamado la atención es que, lógicamente, con su estado de salud también se ha resentido su forma de tocar el bajo y ahora, esas cuatro cuerda con distorsión y los agudos disparados, se emborronan demasiado en directo cuando no ataca la tercera y cuarta sino que rasga las cuatro como una guitarra rítmica.

"Rock It" sube las revoluciones aún más y nos lleva a "Another Perfect Day" (1983) mientras que la preciosa " Lost Woman Blues" de su "Aftershock" (2013) hace pinchar la actuación cortando directamente el rollo, a plena luz del día y con alevosía, a todos los asistentes pero seguramente le da un respiro al propio Lemmy que se siente especialmente cómodo en ella y alarga las estrofas. "Doctor Rock" recupera músculo para la actuación y será rematada por un impactante, como no puede ser menos, solo de batería de Mikkey Dee; es digno de elogio cómo toca el sueco, es un auténtico animal. La gran sorpresa es la olvidada "Orgasmatron" que, personalmente agradezco, y que le sienta como un guante a la oxidada garganta de Lemmy. "Going To Brazil" de "1916" (1991) no es de las mejores de su repertorio pero me encanta, su riff es puro rock 'n' roll y la letra siempre me ha parecido tan divertida como frenética; "Here we go again on a 747. Looking at the clouds from the other side of heaven. Smoking and drinking. Never gonna stop. Reading magazines, stop me looking at the clock. Wanna watch the movie, can't sit still. Flying down to Rio, Going to Brazil!" pero todavía les quedan un par de ases en la manga y son, nada más y nada menos, que "Ace of Spades" la más coreada de todo el festival (y esos versos; "You know I'm born to lose, and gambling's for fools but that's the way I like it baby, I don't wanna live forever!") y la inmortal "Overkill" que cerraron el concierto más concurrido de las tres jornadas y, sin embargo, uno de los más descafeinados para tratarse de un cabeza de cartel.

Abandonamos el escenario principal con un sabor amargo, hemos escuchado la mítica "Orgasmatron" o una de mis preferidas; la rocanrolera "Going to Brazil".  Han sonado "Damage Case", "Metropolis" y, por supuesto, han acabado con "Ace Of Spades" y Overkill" pero no, esto no es Motörhead tal y como lo conocíamos y preferiríamos habernos perdido este concierto y saber que Lemmy se está reponiendo que ver cómo anuncia una interminable gira llena de fechas y saber que un día nos levantaremos con la triste noticia de que el mundo es un lugar mucho menos excitante sin él. Esto no fue un concierto; sonó a despedida.

© 2015 Tommy Gun
Fotos por © OZIRITH